El sol de tus ojos.

Estamos sentados pidiendo cercanía y no somos mas que distancia, mis deberes y los tuyos no quieren volverse cómplices de nuestra aventura, y es que me desespero, pues llevo días precisándote, pidiendo a gritos de mudo, un beso tuyo, y no hay mas que distancia entre nosotros dos, que si es esto que si es aquello, me importa un comino, lo que quiero es besarte, que te dejes besar, que mis miedos no sean mas que falacias, fabula de la vida real. Que si no encuentro palabras para decir, expresar las cosas que a cada segundo me cruzan desde la punta del pie, hasta el último cabello de mi cabeza, es por que, casi siempre ciento que las palabras quedan cortas. Te quiero en la mañana, tan constante y puntual como el sol, no importa la hora, lugar o circunstancia, sentir tu calor es más que suficiente, es como un sinónimo, es la sensación de tus ojos, postrados en mi, cada mañana al despertar.